» Rendimiento consistente, propiedades de la vaina, y estructura de planta son características importantes a considerar.
» Las características que se requieren para frijoles de mercado fresco y de proceso suelen ser diferentes.
» La resistencia a enfermedades puede ser una herramienta importante para el control de las mismas.
Rendimiento y calidad
El potencial del rendimiento, medido en toneladas o cajas de vainas por acre, es uno de los factores más importantes a considerar en una variedad de ejote; no obstante, la calidad y la estabilidad del rendimiento son igualmente relevantes. La estabilidad del rendimiento indica la frecuencia con la que se produce una variedad, bajo una serie de condiciones (estrés biótico y abiótico) y ambientes (temperaturas y tipos de suelo). Una variedad cuyo rendimiento es moderadamente alto pero constante puede tener preferencia sobre una con niveles de rendimiento variables.
Así mismo, es importante elegir variedades cuyas características de la vaina y la planta sean adecuadas, puesto que tener el tipo de ejote correcto puede ser tan importante como tener rendimientos altos. Existen diversos factores que determinan la calidad del rendimiento, y las características que se requieren para el procesamiento y el mercado fresco pueden variar.
Características de la vaina
La forma, tamaño, color y la posición recta de la vaina son algunos de los factores que se utilizan para evaluar la calidad. Las dos formas básicas de vaina son, plana y cilíndrica. El tipo de vaina plana (también conocido como romano o italiano) es ancho y aplanado. No obstante, la gran mayoría de ejotes cultivados para fines comerciales son cilíndricos o de mata, con vainas en forma de cilindro en corte transversal.1
La longitud y el diámetro de las vainas varían, por ende, para algunos usos se requieren diámetros específicos. El diámetro de la vaina se indica como “tamaño de la criba” (Tabla 1).2 El tamaño de los frijoles cosechados de una siembra será de cierta forma diferente; no obstante, se recomienda que las vainas, en su mayoría, sean del tamaño deseado de la criba, mientras que las demás pueden tener un tamaño mayor o menor al establecido.
Para propósitos del procesamiento estándar, el tamaño de la criba de la mayoría de las vainas debe ser 5, con algunas en categorías 4 y 6. Los procesadores que empacan productos de grano entero pueden requerir vainas de tamaño menor. Para frijoles de mercado fresco se prefiere un tamaño de criba más pequeño, en donde el estándar es el tamaño 4 (Figura 1).
Las descripciones de la variedad mencionan, con frecuencia, la distribución de los tamaños de vaina que ésta produce comúnmente.3,4
Tamaño de la criba | Espesordelcortetransversaldela vaina(mm) |
1 | <5.8 |
2 | 5.8 – 7.5 |
3 | 7.5 – 8.5 |
4 | 8.5 – 9.7 |
5 | 9.7 – 10.9 |
6 | 10.9 |
7 y mayore | >10.9 |
Tabla 1.- Tamaños de tamiz para frijol ejotero basado en el diámetro transversal de las vainas2.
Usualmente, la longitud de la vaina no es un factor relevante. Las vainas más largas representan, por lo general, rendimientos mayores. Sin embargo, las variedades con vainas más largas son propensas a producir más vainas curveadas, y a romperse durante la cosecha y el transporte. Para los ejotes de mercado fresco, la longitud regular es de 5 a 7 pulgadas, aunque algunos mercados prefieren ejotes “petite” de 4 pulgadas. La mayoría de vainas producidas debe ser recta, con menos del 15% de éstas curveada. Esto aplica, principalmente, para ejotes de procesamiento. Por lo general, las plantas con crecimiento vertical producen vainas del mismo tipo, y las vainas más cortas suelen ser más rectas.
El color de la vaina es otra característica importante. Aunque existen algunas variedades amarillas (cera), las comerciales tienen vainas de color verde. No obstante, la intensidad (oscuro a claro) y el tono (amarillo- verde a azul-verde) del color verde pueden variar. Las vainas de color más claro se utilizan para ser procesadas, mientras que se da preferencia a un color más oscuro, azul-verde, en ejotes para mercado fresco. Así mismo, es mejor que las vainas de una planta tengan un color uniforme, debido a que las que tienen un color muy diferente pueden causar problemas tanto para el procesamiento como para el mercado fresco.1
Los requisitos de los procesadores y compradores de mercado fresco con relación a la unión de las vainas al tallo son muy diferentes. En el mercado fresco se prefiere que el pedicelo (el “tallo” de la vaina) no se arranque la vaina, ya que cuando éstas se quiebran, comienza el proceso de oxidación del tejido dañado y toman un tono marrón. Sin embargo, para el procesamiento de ejotes se prefiere retirar el pedicelo, puesto que de cualquier forma, éste se retira durante su procesamiento y así se reduce la duración del mismo.
Otras dos características de relevancia son el “filamento” y el tamaño de la semilla. Ninguna de las variedades actuales “tiene hilo”, es decir que no se requiere retirar los haces vasculares que pasan por las suturas de las vainas. No obstante, el contenido de fibra (o filamento) de dichas variedades no es el mismo, y para los usos del mercado fresco se prefiere vainas más tiernas, aunque un poco de fibra ayuda a prevenir su rotura durante el envío.
La homogeneidad de la vaina se ve afectada por el tamaño de los granos que crecen dentro de ellas conforme maduran. En variedades con granos más pequeños y cilíndricos, las vainas permanecen, por lo general, lisas por más tiempo (Figura 2). De igual manera, la rapidez de crecimiento de los granos no es la misma para cada variedad. Las vainas cuyos granos crecen a gran velocidad, se dice que “llaman la atención”, puesto que no pasa mucho tiempo para que maduren y se vuelvan irregulares conforme crece el grano.2 Los granos grandes también representan un problema durante su procesamiento, debido a que tienden a salirse de las vainas cortadas, lo cual genera espacios en ellas y pedazos de estos en el fondo de la lata.
Características de la planta
La altura, el grado del hábito de crecimiento horizontal, y el lugar de la formación de la vaina en la planta no son los mismos para las de ejotes de mata que se comercializan. Tanto para las vainas que son para mercado fresco como para las que se procesan, es conveniente una planta erecta con la formación de la vaina en la parte media a superior del dosel. Por lo regular, las plantas más altas tienen una producción mayor, aunque son más propensas a quedar encamadas (plantas que caen a la tierra), principalmente cuando tienen una carga grande de vainas en la parte superior del dosel. Las plantas con raíces fuertes son menos susceptibles al encamado, y es menos probable desenterrarlas durante la cosecha mecanizada.1
Es importante tener plantas con ramas fuertes debido a que disminuye la cantidad de basura (tallos y hojas) que se recolecta junto con los ejotes. Para el procesamiento de ejotes se prefiere plantas compactas y erguidas, aunque aún es importante Una variedad cuyas vainas no entren en contacto con la tierra, debido a que esto aumenta los casos de vainas podridas y curveadas.
Resistencia a enfermedades
Se debe considerar las características de resistencia a una enfermedad, puesto que éstas pueden repercutir de manera significativa en la producción y la calidad de la vaina. Las enfermedades bacterianas, incluyendo la mancha marrón y la grasa, aparecen en hojas y vainas haciéndolas ver mojadas o con puntos marrón.
Los síntomas de las hojas provocan una pérdida del área fotosintética, que resulta en una cantidad y tamaño menor de vainas. Las manchas en las vainas afectan su calidad, y no se pueden comerciar.4,5 La antracnosis y la roya del frijol son enfermedades causadas por hongos que también afectan a hojas y vainas.
La pudrición de la raíz por Aphanomyces y por Pythium, así como las manchas foliares por Phytium son enfermedades causadas por hongos que habitan en el suelo e infectan raíces y tallos. Inicialmente, las plantas infectadas se marchitan mientras que la raíz y las funciones vasculares se van deteriorando. Cuando estas enfermedades son graves pueden causar la muerte de la planta.6
Los patógenos virales relevantes de los ejotes incluyen el virus del mosaico común del frijol (BCMV) y el virus del mosaico del pepino (CMV). Usualmente son los insectos, tales como los áfidos, los trips y las moscas blancas, quienes transmiten los virus. Una vez que se infecta la planta, estos se propagan por ella de manera sistemática, afectando su crecimiento y el desarrollo de las vainas.6
Muchas de estas enfermedades pueden controlarse mediante la selección de variedades resistentes. Una “alta resistencia” podría ser una característica de ésta misma, lo que indica que una variedad con este rasgo es capaz de limitar en gran medida las acciones del patógeno, en comparación con una que es susceptible. La “resistencia intermedia” indica que una variedad con esa característica limita el crecimiento y el desarrollo del patógeno, pero puede presentar una gama de síntomas mayor a la que se tendría en una con alta resistencia. Algunos síntomas se pueden desarrollar, incluso en variedades con alta resistencia; sin embargo, niveles más bajos de la enfermedad producen una mejor cosecha y calidad.
Referencias
1 Myers, R. and Baggett, J. R. 1999. Improvement of Snap Bean. p. 289-329. IN: Singh S. P. (ed) Common Bean Improvement in the Twenty-first Century. Dordrecht:Kluwer.
2 Duncan, A., Every, R.W., and, MacSwan, I.C. 1960. Commercial production of bush snap beans in Oregon. Oregon State Coll. Ext. Bull. 787.
3 Neibauer, and Maynard, E. 2012. Commodities-Snap beans. Purdue University. https://www.hort.purdue.edu/prod_quality/commodities/bean.html.
4 Rutgers New Jersey Agricultural Experiment 2015 Commercial Vegetable Production Recommendations for New Jersey. Publication E001. Beans: Snap and Lima.
5 Elwakil, M. and Mossler, M. A. 2015. Florida crop/pest management profiles: Snap beans. University of Florida IFAS Extension, CIR1231. http://edis.ifas.ufl.edu/pi032.
6 Schwartz, F., Steadman, J. R., Hall, R, and Forster, R. L. 2005. Compendium of bean diseases; Second edition. American Phytopathological Society. Web sources verified 03/17/2016.
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